¿LOGOMANÍA?

La logomanía llegó a su fin. Después de años siendo anuncios andantes de grandes firmas se impone la neutralidad, es decir llevar el último must de las grandes casas pero con discreción.

Tantas iniciales de CH, CC y LV, han dado lugar a las más burdas copias de los logos, aunque el original siempre tendrá la calidad y el acabado que el precio, en algunos casos desorbitado, merece.

Hoy en día hay copias tan buenas, que incluso a los diseñadores les cuesta distinguir lo que han fabricado ellos en sus talleres de aquello que ha sido fabricado en el taller del señor Chun ling. No hay más que echar un vistazo por una de las principales webs de subastas para comprobarlo. De todos es sabido, que la gran mayoría de artículos que circulan por dicha Web son imitaciones, pero eso si 100% originales, según los anuncios de los productos.

Lo que me conocen saben mi pasión por los bolsos y zapatos, heredada tanto de mi madre como de mi hermana. Para quienes no me conocéis, no os podéis hacer una idea. Gracias a Dios, o mejor dicho a que todavía soy estudiante y no dispongo de una Visa Oro, para endeudarme con el banco, como le pasa a mi querida Becky, en Loca por las Compras, y también a un novio extraordinario, que me hace poner los pies en el suelo y las manos en los bolsillos cuando nos vamos de compras, no tengo de que preocuparme.

El problema es que me he enamorado, no de uno, si no de dos asombrosos, magníficos y fabulosos bolsos, pero que nunca podrán remplazar a mi primer amor, el Spy Bag de Fendi.

El primero es Buckled de Fendi, y de apellido 2,150 euros, euro arriba, euro abajo, según el modelo.

El otro, es el ya conocido, Muse de YSL, no me había dado cuenta de lo extraordinario que era hasta que lo vi en YSL, artesanía pura, cuidado en cada detalle, y líneas clásicas con un aire art deco, con un precio un poco más asequible, para unas pocas, 1.000 euros.

Lo mejor de estos bolsos, es que, o conoces el diseño o no sabes que son de Fendi e YSL. No llevan letras gigantes gritando de donde son, ni cuanto te han podido costar, eso sí, los ves y sabes que son especiales.

A muchos les podrá parecer una barbaridad dejarse esa cantidad en un simple bolso, pero no estamos hablando de un bolso cualquiera, si no del BOLSO, ese que te sirve tanto para un roto como para un descosido, para ir a trabajar como una autentica working girl, luego para recorrer todos las tiendas como una autentica shopping girl y terminar cenando como una autentica...¿ dinner girl?. Vamos que no te lo quitas para nada, única y exclusivamente para ir a la cama, pero tampoco lo dejas muy lejos, por si las moscas.

En fin chicas que si queréis aportar algo para la causa, estaré encantada, porque creo que por el momento, mis dos nuevos amores se van a quedar junto con mi primer amor….en mis sueños.